La humildad

© | | ,


floresHola mis amigas, hoy les traigo una historia de una amiga, pero con la que seguramente muchas se podrán identificar.

Hoy vamos hablar de la humildad, algo que no todos tenemos, y que tanta falta hace para la humanidad.

Ella cuenta así:
Hace unos días una amiga me escribió una dura carta, y me quedé pensando qué había cambiado en nuestra amistad…

En mi casa hay una persona que piensa que todo el mundo le debe algo, que todos debemos vivir al ritmo de su mundo, salonjamás mira si hay otro ser humano con apuros y con carencias. Es del tipo de persona que tiene mucha suerte en la vida pues lo consigue todo fácilmente, sin esfuerzo. Como por arte de magia todo lo bueno que se llega a recibir en el hogar las toma para sí mismo, como si todo fuese para él.

Recientemente esta persona visitaba a un humilde amigo, de esas personas que trabajan de sol a sol para salir adelante en un país extranjero. Se dirige él para contarle la «maravillosa vida» que tiene, lo bien que vive, los placeres que puede permitirse, y el poco esfuerzo que le supone. Y yo me pregunto, ¿por qué hay personas que hacen eso? ¿Cómo puede ir alguien a la casa de un pobre a decirles que come filete todos los días?

La falta de humildad que a veces tenemos frente a nuestros semejantes es tan triste que hasta segunda_casame cuesta contar las anécdotas de este ser humano tan pobre de espíritu. Debemos reflexionar antes de hablar sobre aquello que poseemos porque hay muchas personas menos afortunadas que no tienen ni lo más básico para vivir.

Esta soberbia y falta de humildad puede alejarte de los demás, de la gente a la que quieras… Pero el orgullo no sólo al soberbio le aleja de los demás… también aleja a esas personas de quienes comparten el hogar con él. Y entendiendo esto es por lo que entiendo los motivos por los que al recibir la dura carta de mi amiga me dio la sensación de que algo malo estaba interponiéndose en nuestra amistad.

florecilla florecilla

La humildad es algo que se debe llevar en el corazón porque Dios fue el ser más humillado y aún así nos perdonó y sigue perdonando la falta de humanidad que tenemos con nuestros semejantes. flor_marchita

La vida de una persona soberbia es muy mala, estar y vivir cerca de ellos no es bueno para la salud. Si tienes a una persona así cerca de ti, es mejor alejarla o ayudarla a que vea su error, pues no le hacen bien a nadie. Tanto lo uno como lo otro seguramente será muy difícil, alejarle porque pensará que le debes algo, y querrá seguir teniendo esa «suerte» en la vida. Hacerle ver su error será igualmente complicado, porque precisamente su falta de humildad le cegará. En cualquier caso, vivir con alguien así es nocivo para la salud.

Una persona agradecida es la que muchas veces lo ha perdido todo y aún sigue feliz flor_creciendode haber contado con el amor de las personas que le conocieron, pues aún en su mismísima situación sigue tan humilde como cuando era una persona con una situación envidiable.

La verdad es que no se necesita mucho para ser una buena persona.
Ni aún siendo afortunados en la vida hace falta mucho para ser buenas personas. Sólo hace falta seguir siendo personas sencillas, con valores, que llora cuando alguien sufre, que sentimos cuando alguien se nos va, que cuando llega los éxitos no deja de ser humilde… Seguro que con ello tenemos un trozo de cielo ganado, o al menos, tendremos los ojos de Dios cerca de nosotros…

florecillas Aprendamos a vivir con lo que tenemos, y seamos buenos con quien tiene menos que nosotros.

Seamos humildes, y no nos permitamos alardear de lo que la vida nos ha dado.

¿Qué piensan ustedes?

Las quiero mucho,
Shoshan


Anterior

Pasa el tiempo y aún no puedo olvidarte

Pasa el tiempo, y aún no te puedo olvidar... pues sigues aquí, en un lugar del que no te puedo borrar. O quizás simplemente, es que no te quiero olvidar. Amigas, aquí la historia de hoy: Cuando paso por una…...

¿Detrás de tu silencio qué se esconde?

Hola mis amigas... Todas tenemos algo que nos lleva a estar tristes o alegres, siempre tenemos un "minuto de silencio" para nosotras mismas... Yo siempre necesito estar a solas, estar callada, estar en silencio, y no se piensen que por…...
Siguiente

31 comentarios en «La humildad»

  1. Hola a Tod@s:

    Es un tema excelente.. creo k como seres humanos la Humildad es una de los mayores valores k debemos profesar… en la vida y con todos akellos k nos rodean….
    K feo mirar sin poder hacer nada.. saber k tu puedes ayudar y no hacerlo.. donde esta tu corazón… como ser Humano …
    Mucha gente solo pasa sin ver… sin sentir la necesidad del projimo….
    Les contare hace poco mi esposo y yo andabamos buscando a un tío suyo.. k haci muchisimos años no veia….
    Lo encontramos si Dios nos ayudo pero en k condiciones.. este hombre ya no podía ni andar.. estaba paralitico.. de su casita k puedo decir puro cartoncito.. y viven a las orillas de un rio .. lo k vimos los dos nos dejo sin habla.. entramos platicamos con los viejitos y mi esposo y yo casi salimos llorando ante tal situación de pobreza…
    Y nos preguntabamos y los hijos ?.. los hijos solo ven su futuro ya no les importan sus viejitos.. k horror…
    Ese mismo dia regresamos mi esposo y yo y ante tal demostración de la vida les trajimos un poco de ayuda tal vez no la necesaria.. pero sentimos satisfación de poder ayudar a esa gente tan necesitada….

    Creo k muchas de las veces despojarnos de algo k a nosotros nos sobra y dar un poco .. eso es ser Humilde…..

    Gracias x tan bello tema… Recuerden k ayudar no nos cuesta nada… Ama a tu projimo como a ti mismo…

    Sonrian.. Dios las bendiga

    Responder
  2. Maya, que linda lección de amor nos das, y que suerte también que tu esposo sea de tan buen corazón como lo eres tu..
    Muchas veces nos apegamos tanto a las cosas materiales que nos olvidamos que hay personas que necesitan de todo , si todos nos ponemos a pensar en la forma que tu y tu esposo lo hicieron seria un mundo mucho mejor y seguro que Dios nos tendrá en cuenta…
    Hay que ser humildes, no querer lo que los otros tienen , conformarse con lo que tenemos, esta amiga nuestra se ve que esta muy decepcionada con esa persona que lo único que muestra es lo poco que vale como ser humano, porque no tiene humanidad…
    Mi cariño para ti…
    Gracias por inaugurar el tema..

    Shosh

    Responder
  3. Hola a todas.
    Siempre hay que dar gracias por lo poco o mucho que tenemos, ser humildes ser buenas personas, nos hace mejores personas, hay gente que ya al ver sus logros no lo reconocen se vuelven soberbios, sin corazon, solo les gusta mandar y como saben que talvez tienen el poder mas lo hacen, «dicen que las acciones que uno hace se nos regresan» bien o mal aveces no, a nosotros mismos si no hacia terceras personas familiares, amigos a personas que estimamos.
    Tratemos de ser felices y hagamos felices a los demas.
    Cuidense mucho y muchos saludos.

    Responder
  4. Hola:
    Yo soy una persona muy humilde, económicamente hablando, pero me considero una persona también de espiritu humilde, No tengo de qué presumir, no soy vanidosa, me gustan los actos altruistas, darlos y recibirlos, no hago mucho caso cuando tratan de humillarme, nada como estar en paz con dios, definitivamente, la biblia dice que desnudos salimos del vientre de la madre, y desnudos nos iremos, y así es, También he aprendido que en la vida, conforme estamos arriba, ya estamos abajo, y más vale acostumbrarnos a estar abajo, por que cuando estamos arriba, y caemos es más doloroso, (económicamente hablando)
    Gracias.

    Responder
  5. Hola a Todas mis Bellas Mujeres.. tenía días sin entrar, primeramente porque vivo en uno de los condados de california que fueron afectados por los incendios… y segundo estuve medio de vacaciones y en un evento muy importante unos dias pero aqui estoy poniéndome al tanto con los bellos temas… en cuanto a los regalos no deseados.. mi mami siempre me dice.. el veneno no mata si no te lo tomas.. asi que super de acuerdo que uno tiene el poder de elección al momento de recibir un trato injusto muchas veces o desagradable por parte de los demás.. el chiste esta en como reaccionamos al respecto y no dejar que nos perturben o que gente mezquina nos tome la delantera con sus acciones o palabras malsanas.. el cuanto al decir Adios.. creo que es un paso muy dificil, sobre todo cuando hay vínculos llamados hijos, y más aeptar o darse cuenta que el sentimiento ha cambiado y enfrentar o afrontar una decisión como decir Adiós.. pero amigas, es preferible sufrir un poco con la verdad que gozar con la mentira como dicen luego.. vale más la honestidad, la sinceridad, la comunicación y tomar la mejor decisión.. en lo personal, a veces prefiero que me dejen de querer o no me quieran a que yo tenga que decir adiós ya no te quiero o no te puedo querer.. los sentimientos de las personas se me hacen algo tan valioso.. como objetos de alta cristalería que lleva uno en las manos y dice con permiso, con permiso, cuidado, con mucho cuidado para que no se nos vayan a caer.. pero también estoy conciente que la vida es así y que a veces unos tienen que reír pa que otros lloren.. a veces se sufre más con sacrificios y falsas apariencias o conveniencias por eso es mejor que con Amor y Comunicación, se llegue a la mejor solución o relación. como dicen por ahi más vale tener un buen amigo que un mal amor no.. bueno y en cuanto a la humildad solo les puedo decir que solo un Ser Grande va a haber la grandeza en los demás.. cuando alguien se siente inferior o inseguro nunca va a querer sentirse solo así y querrá sentirse bien haciendo sentir mal a otros.. alardeando lo que és, lo qie tiene, lo que hace.. la Humildad va más allá de ayudar a los demás, de sensibilizarte del dolor ajeno, de vestir modestamente.. es aceptarte como un Ser Humano, y humano significa dar la mano.. y tratar a todos como tal. como seres humanos, es poder aceptar tus errores, tener la capacidad de enseñar y sobre todo de aprender de los demás, es darle a cada cosa y a cada persona su justo valor, si se fijan cuando terminamos una oración decimos Amén verdad? Dios nos dice Amén, Amen, Amen a sus semejantes, Amense los unos a los otros.. cuando nos veamos como lo que verdaderamente somos, no habrá divisiones, no habrá gente soberbia, orgullosa, gente con poder abusando del que menos tiene o del que menos sabe.. Amén. aquí radica todo..

    Responder
  6. QUERIDA AMIGA ALAS:

    Muy hermoso tu comentario amiga querida. La humildad, valioso tesoro que no todos los seres humanos sabemos desarrollar y mucho menos mostrar a quienes más lo necesitan.

    Desgraciadamente la humildad como la prudencia, no son valores que abunden mucho en nuestro mundo, y es una tristeza que en verdad el pez más gordo siempre tienda a comerse al más pequeño, pero nunca nos damos cuenta que tambien siendo pequeños podemos demostrar al más grande esa buena dosis de humildad que necesita.

    La soberbia vuelve altanero al que más tiene o más puede y qué lástima que así sea, que no se de cuenta que teniendo más podría dar o ayudar más y hace todo lo contrario, entre más tiene más quiere tener para humillar al más débil. Es la regla general del ser humano pero ay, de aquel que lo tuvo todo y que pudiendo haber ayudado en su momento, se volvió egoista, inhumano, pasivo e indolente precisamente por su orgullo de ser y tener más, olvidando que en el dar también está el recibir.

    Muy bellas palabras las tuyas amiga querida, muchas gracias por escribirnos.

    Vuestra amiga siempre.

    Doral.

    Responder
  7. BUENAS TARDES GLORIA MARTINA:

    Verdades muy ciertas dices amiga querida, ¿cómo no reconocerlo?
    Hola:

    No es la humildad o pobreza económica la mejor forma de sentir que no se puede ayudar, por el contrario, creo que entre más humildes seamos, se valora más lo poco que se tiene.

    Hay gentes que se ven humildes y como tú dices, también son humildes de espíritu, sin embargo yo tengo otro enfoque hacia tu comentario, creo que hay personas que parecen humildes, cuando en realidad son más grandes de lo que parecen, qué paradoja amis, pero así es.

    Creo que la presunción tiene dos caras amiga, se puede ser presuntuosa por seguridad, o por vanidad, es muy fácil de saber reconocerlo, pero cuando esa presunción (como sintomatía de seguridad y elevación de anhelos), es utilizada para efectos de caridad, es válida ¿por qué no? si suponer que presumimos tener un nivel de ser, aunque no tengamos ningún nivel social o de saber, implica que desde nuestra trinchera estamos capacitadas para poder dar sin tener necesariamente que vanagloriarse por lo que damos, pero si lo hacemos con presunción vanidosa, ególatra y por demás altanera o soberbia, pues allí si que hay otro problema más que resolver encima de que no sabemos dar.

    Estoy totalmente de acuerdo contigo cuando dices que cuando nacimos no traíamos a este mundo, ni un triste alfilerillo, y cuando nos vamos de este mundo, tampoco nos llevaremos nada material, pero sí los valores que se hayan cultivado en vida, es una ley vital de la misma naturaleza y de Dios, concuerdo totalmente con ello, y que caray es verdad, entre más arriba se esté, más peligro hay de caer en la soberbia, en la egolatría, en la vanidad y en la inconciencia.

    Gracia a tí amiga querida por escribirnos, muchas gracias por tu valioso comentario.

    Vuestra amiga siempre.

    Doral.

    Responder
  8. mira te dire algo querida amiga ser humilde es bueno pero solo en la cantidad justa..si te ven muy humilde creen que eres tonta por eso a veces es mejor ser un poco menos humilde para que no abusen de una ..con cariño

    Responder
  9. MI QUERIDA AMIGA KLCK, KARLITA:

    Gracias Karlita querida por volver a nosotras, ya te extrañaba mucho mi niña, me alegro que estés de regreso sanita y salva para seguir leyéndote, siempre fresca y decidida en todos tus comentarios amis querida.

    Respecto a tu comentario sobre la humildad reina, es verdad, sólo los grandes seres pueden y saben amar, entender y comprender a quien carece de estos valores. Uno reaccionan mucho, pero otros comprenden y ayudan mejor.

    En este sentido la humildad se vuelve casi heróica, un buen código secreto para engrandecer el Espíritu que es siempre divino dentro de nosotros. Esa partícula divina que habita en el corazón de la mujer se vuelve más sensitiva, más altruiste, más comprensiva y más creadora cuando a pesar de saberse llena de amor, no escatima para darlo a manos llenas, incluso a veces sin esperar nada a cambio.

    Y por supuesto, sí estoy de acuerdo que la pobreza, cuando se presenta en el corazón humano, siempre lo hace acompañada de una amargura de peso y altura: Envidias, acechanzas, temores, inseguridades, intrigas y celos de los que más tienen cuando su pobreza no consiste en no tener dinero, sino en no tener lo que a otros les sobra: Riqueza de Espíritu. Estoy totalmente de acuerdo contigo reinita.

    Desgraciadamente la mayoría de las personas que tienen mucho capital, hablando monetariamente, se olvidan que su capitalito en monedas lo pueden invertir a largo plazo en capital cósmico. Se olvidan de ayudar a los demás, de aliviar el hambre y la enfermedad, las necesidades de quienes menos tienen, se vuelven como unos monstruos de egoismo atesorando y cuidando sus valores que a la postre ni siquiera los hace felices.

    Entonces digo yo, si esas personas encumbradas en posiciones sociales, con títulos y cartones colgados en su pared hermosamente decorada en hoja de oro y gruesas alfombras aterciopeladas en las que al caminar uno por ellas hasta se hunden los zapatos, si esas personas se dieran cuenta de cuántas boquitas podrían alimentar en el mundo con tanto dinero que utilizan en lujos innecesarios, podría ser que su suerte les llegara doble, precisamente porque estÁ n invirtiendo en vida lo que tienen.

    Pero se olvidan de la palabrita «humildad», con su dinero se creen tambien que pueden comprar derechos de humillar, de despreciar, de atropellar al más pobre, lo barren con la mirada de arriba hacia abajo como animales raros, y como es obvio, el pobre se siente más pobre, más intruso, menos o poca cosa, no tiene valor ni para subir la cara cuando por hambre tiene que abrir sus manos para recibir la limosna o migajas que a veces recibe hasta por lástima. Pero hay ricos que ni siquiera lástima sienten, es más fácil hacer caso omiso dándo la espalda y abandonar a su suerte a quienes tocan a su puerta, sin pensar que como dice el dicho: ARRIEROS SOMOS Y EN EL CAMINO ANDAMOS, y que a cómo ven a los pobres, así mismo los verán a ellos, pues Ley es Ley y tarde o temprano con la vara que medimos, seremos medidos.

    Por lo tanto Karlita querida, yo concuerdo totalmente con tus hermosas palabras sálmicas que a mi manera te expongo:

    La soberbia, el orgullo, la vanidad, la vanagloria, el egocentrismo, la cicatería, son factores de pobreza de espíritu, o ramificaciones de grandeza falsa envuelta en ignorancia…puro oropel manita, totalmente de acuerdo contigo.

    Muchas gracias por estar y por existir Karlita querida y mil gracias por escribirnos, ya sabes que aquí tienes tu casita virtual esperándote con mucho cariño siempre.

    TQM y estoy muy agradecida de todos tus aportes.

    Vuestra amiga siempre.

    Doral.

    Responder
  10. BUENAS TARDES MI QUERIDA AMIGA DORA:

    Tu mensajito hermoso amis, breve, claro, preciso y conciso llevan una buena dosis de verdad.

    La humildad es como una fuente de eterna sabiduría en la que no se bañan todos los seres del mundo, ni comulgan con ella los poderosos pasajeros de este mundo de sueños y quimeras, pero bendito sea Dios que el poder no se hizo para gente caprichosa y que tarde o temprano los arcos de los fuertes se quebrarán ante las miradas humildes y compasivas que pudiendo tenerlo todo, prefieren quedarse sin nada, perderlo todo, precisamente para ganarlo todo, aunque como dijo Dios nuestro señor: Su reino no sea de ni para este mundo. Eso es todo amis querida.

    Muchísimas gracias por tan lindo comentario tuyo.

    Vuestra amiga siempre.

    Doral.

    Responder
  11. Muy buen dia a todos 😆 , soy nueva y acabo de leer este maravilloso articulo, dejenme les cuento que desgraciadamente en mi familia existe una persona adulta con las caracteristicas que se mencionan de una gente muy soberbia, me siento muy triste porque pues por ser un familiar muy directo tenemos que convivir con el todo el dia todos los dias, el lo a tenido todo y no lo supo valorar, solo alardea de sus conocidos, sus amigos influyentes que son lo mejor y lo lejos que han llegado profesionalmente, sobaja al que se le ponga enfrente, y lo destruye con sus palabras, pero en efecto estoy de acuerdo que esa gente es pobre de espiritu, nadie lo tolera, los amigos solo duran un tiempo despues se alejan y el siempre dice q se alejan de el por envidia, porque no toleran verlo brillar y estar muy bien economicante sin mover un dedo, y si tambien tiene suerte ya que sus parejas le dan todo imaginense!!! y asi ha sido su vida desde que tengo uso de razon. solo veo que el pobre al final terminara solo y le pido a Dios que le de la fuerza suficiente para estar preparado ya que no se deja ayudar y asi nada se puede hacer. Y a nosotros su familia la fuerza para soportar tales acciones con los demas porque desgraciadamente a nosotros nos lleva con el, ya que la gente piensa q somos igual que el. Gracias por este espacio. Dios los guarde y los proteja siempre.

    Responder
  12. Es un tema muy bueno que no solo se debe tocar acá sino que también dentro del ámbito familiar.

    Vaya que nos cuesta muchas a veces ser humildes o bien ser agradecidos, creemos que todo lo merecemos y que lo obtenido es para demostrarle solo a los demás. Creo justo que aquellos que han luchado para tener un mejor estándar de vida también deben disfrutarlos, lo que no es correcto es humillar a aquel que quizás la vida no le a brindado las mismas oportunidades a pesar del esfuerzo quizás realizado…. Muchas veces vemos a personas que por sus logros tienen una buena posición en la sociedad y se creen con el derecho de pasar a llevar a los otros, sin embargo aquel que ha nacido en cuna de oro muchas veces es más humilde que muchos de nosotros.

    Un día escuche el comentario de una persona muy mayor, que decía que los padres no enseñaban a sus hijos a ser agradecidos y que creen que todo lo que obtienen es porque han nacido para ello, pero en realidad Dios hace que muchas cosas sucedan se abren puertas o bien se cierran otras, con el tiempo nos damos cuenta que fue para mejor.

    Cuando tienes existo también nace la envidia del otro, pero su ceguera no les permite valorar lo que tienen en sus manos.

    Bueno es lo que pienso y siento, cariños Vivian 😆

    Responder
  13. Queridisima Shohan!
    Estas en lo cierto cuando dices que la Humildad hace falta en este mundo, y que Jesucristo fue el primero en darnos ese ejemplo de humildad, al ser humillado y con todo y eso perdona nuestros pecados. Una persona soberbía, es una persona digna de lástima. Porque la gente no querrá estar a su lado. Es una persona que inconsientemente no se valora lo suficiente, por que recurre a cosas superficiales para justificar el valor que tiene como persona. Cree que sin todo lo que tiene no vale nada. Lo que nosotras y nosotros debemos hacer en este caso, es incluirnos en nuestras oraciones para que Vuelva al Amor.

    Una persona que actué así, definitivamente no conoce la naturaleza humana. Todos tenemos el deseo de ser importantes. Sabiendo esto, cualquier persona con que conversemos deseará hablar de ella misma. Por que la naturaleza humana es egoísta. Si nosotros queremos triunfar en las relaciones humanas, no lo debemos perder de vista.

    Debemos recordar, que no lograremos cambiar a las personas, lo que si podemos cambiar somos nosotras. Ver las cosas desde otro punto de vista.

    Un abrazo, se les quiere, Olga de Venezuela 🙂

    Responder
  14. BUENAS NOCHES MI QUERIDA BIANKA:

    Bienvenida a esta nuestra casita virtual, y gracias por tu aporte, el cual es altamente apreciado.

    A lo largo de nuestra vida, nos toca muchas veces tratar con personas como la que tu describes, como quisieramos hacerlas cambiar, especialmente cuando son personas alas que amamos, quisieramos poseer una varita magica ,para hecerles entender que los celos, la envidia, y la falta de humildad, no solo hace sufrir a quienes padecen de ello, sino quienes estan cerca.

    Piensan que se hacen notar, si hacen alarde de lo que tienen o de lo que hacen por otros, alguien muy cerca de mi, tiene el habito, si da 5, dice que fueron 10, y si le dan 10, dice que fueron 5 y lo que es peor, nunca acepta que lo poco o mucho que tiene, ha sido un logro de familia, se atribuye a si misma los meritos, no acepta que alguien le ayudo, que el esfuerzo de terceras personas tambien cuenta, y dice a voz en cuello, «estoy donde estoy, gracias ami esfuerzo».
    Yo solo puedo sentir pena por esa clase de personas, poque te dire mi querida amiga, que al final, y eso no lo piensan, en la misma cama donde murio un pobre un humilde, y hasta un mendigo, ahi muere tambien un rico.

    Escuche una vez a alguien comentar, «es mas facil que un camello, pase por el ojo de una aguja, que un rico entrar al reino de los cielos» y cuanta razon tienen, mi reina, esa gente no se toca el alma para lastimar, para humillar, no les importa comer pollo delante del hambirento.

    Solo nos queda seguir amandolos amiga mia, orar por ellos, pedirle a DIOS que en su bondad, no los deje caer, y si caen pues estar ahi, preparados para detener su caida, solo nos queda orar por nosotras mismas mi corazon, paraque DIOS nos ponga esa humildad en nuestros corazones, y poder de ese modo, dar amor a manos llenas sin poner atencion en la raza, color, credo o pocision social.
    No se te olvide, que entre mas arriba se sientan, mas dura sera la caida.
    Gracias de nuevo mi corazon, te esperamos en esta tu casita virtual , de la cual ya eres un miembro muy importante.

    Amiga siempre…Amanecer

    Responder
  15. Buenas noches amiga Shoshan . que hermosa tema la HUMILDAD.
    Te contare un poco de mi vida yo crecí en una aldea prácticamente en la chacra,
    Es curioso mis abuelos me enseñaron compartir todo lo que es comer, no podías comer delante de la gente, si comes alguna fruta o lo que sea tenias que compartir con las personas que están a tu lado. Si no mejor no comer delante de ellos.

    Otra cosa siempre ella compartía sus primeras cosechas y cuando carneaba sus animales con sus familiares sin a cambio nada, lo recibía y con sus vecinos, yo crecí con esa mentalidad ser feliz a la hora de comer,

    Pero el día que me junte con mi pareja todo cambio mi vida era frío y soledad, mi pareja ya no tenia los mismos pensamientos que yo, todo era para su familia solo su familia no le gustaba compartir con nadie, a ver ese pensamiento negativo a mi me choco bastante hasta que me acostumbre a sus costumbres, Pero yo me siento muy mal de esas cosas discutimos el siempre tiene la razón y con su egoísmo.

    Tampoco es bueno ser demasiado buena, si eres demasiada buena, la gente te pisotean no te respetan te dan mal pago.
    Buenas noches amigas que tengan dulces sueños.

    Responder
  16. Querida Amiga Soshan:

    Recibe un caluroso saludo desde mi bella Isla del Encanto…El tema de la humildad es abarcador y existen diversas opiniones…Considero que la verdadera humildad radica en saber actuar con modestia; saber vivir, en mucha o poca escala, con lo que se tiene; buscar siempre el bienestar de los demás antes que el bien propio…Hay quienes lo tienen todo y no tienen nada; hay quienes que no teniendo nada, lo tienen todo…

    Hay quienes viven y van por la vida creyendo que se lo merecen todo, sin dar a cambio nada…solamente porque han nacido en cuna de oro y otr@s, porque han luchado tanto en la vida para alcanzar lo que tienen que no están dispuestos a compartir un poco las bendiciones que Dios les ha dado…

    La humildad es considerada una virtud, pero a la misma vez es una actitud; es esa actitud que tenemos para con nuestros semejantes…Quien no reconoce sus fracasos o hace pretensiones de sus logros, no es una persona humilde sino soberbia…

    No podemos permitirle a los demás que nos humillen, pero tampoco podemos ir por la vida humillando a los demás; quien tal haga es soberbi@ en su pensar, en su espíritu…

    Antes bien, seamos agradecidos con lo que tenemos, incluyendo las pequeñeces que nos da la vida…y compartamos con otros las bendiciones que Dios nos regala…

    “El secreto de la sabiduría, del poder y del conocimiento es la humildad”…
    Ernest Hemingway

    Abrazos…

    Gaviota Viajera
    Puerto Rico

    Responder
  17. BUENOS DIAS TIERNOCORAZON:

    He leído tu historia amiga querida en la cual me reflejo profundamente y con un nudo de emoción en la garganta, me retornas a mi propia niñez retratada en tus palabras.

    ¿Cómo no recordar a aquella chiquilla inquieta, flacucha de pelo largo y ojos vivarachos que hacía lo mismo que tú? te la comparto amis:

    La pobreza econòmica azotaba fuerte en aquel tiempo, mis padres: unos humildes maestros rurales que descosían un saco para remendar otro, que pegaban a veces las puertas de la rústica escuelita con corcholatas de refrescos y pedazos de ladridos de barro hecho en casa, que aprovechaban hasta el papel del pan para preparar sus clases, que tenían que enseñar a los niños a limpiarse los dientes hasta con tortillas quemada porque no había fondos para comprarle pasta dental. Aquellos niños compañeritos que llegaban a veces a clases con sus pies descalzos en pleno invierno…¡Dios! sólo recordar me sacude un escalofrío en la espalda amis.

    Pero qué riqueza más grande que nos enseñaran a compartirlo todo como si el pueblecito entero fuesemos una gran familia, donde era una costumbre que al terminar de prepar los quelitos (ramas verdes) y las tortillas, el primer invitado a la mesa era el vecino, pues mi madre (recuerdo), me mandaba con el platito de la humilde vianda a la casa de enfrente para compartir la comida.

    Y aquellos días en que yo tenía que deshacerme de uno de mis pocos vestidos para regalarselo a la niñita de la esquina que no tenía más que uno sólo y ya parecía fotografía siempre con la misma ropa roída y a veces hasta sucia. Y mis sandalias de plástico tan lindas y coloridas, uf…me sentía millonaria porque otras niñas no tenían ni siquiera éso.

    Pero amis de mi alma, a cambio de tantas cosas que hacían falta en casa allá en mi pueblo, los abuelos y mis padres los maestros pobres del pueblo, iban llenando la tinaja de mi vida, día a día con agua nueva, agua de anhelos, agua de sabiduría, agua de sueños, agua de ternura, y agua de decente y noble amistad.

    No había juguetes, teníamos que inventarnos las pelotas haciéndolas con calcetines cocidos llenos de trapitos, no había matatenas de lujo, las implementábamos con pedazos de hule recogido del basurero, las muñecas también eran echas en casa con sobrantes de los más simples retacitos de tela usada y desechada.

    Mi diversión más grande: Todos los días al amanecer, irme corriendo hacia la casa de mis abuelos, y sin que nadie me viera, subirme a unos árboles de ciruelos para ver salir los primeros rayos del sol, que era el espectáculo más maravilloso del mundo para mí.

    Por supuesto siempre le ganaba al sol, siempre llegaba primero antes de que este saliera, y allí encaramada en los Á rboles con mis ojos negros muy abiertos, fijos y pendientes en la colina, esperaba ansiosa ver cómo el astro rey se acercaba, y cuando veía despejarse la luz, sin que el sol saliera aún, mi corazón empezaba a palpitar tan fuerte y mis ojos se abrían casi gritándome: ¡Allí viene…allí viene, ya casi llega!

    Y cuando por fín, despuès de unos minutos de espera, veía asomarse al coloso, aplaudiendo con todas las fibras de mi ser en la sonrisa, cada rayo que iba asomándose por la colina y filtrándose a través de los árboles. A veces era tanta la emoción que mis ojos se arrazaban de lágrimas. En mi mente infantil pensaba tantas cosas y le decía al sol…¡Qué hermoso eres!, quisiera saber ¿qué o quién eres y dónde vives? ¿desde dónde llegas hasta mí? ¿quienes son tus padres? ¿tienes hermanos?, ¿cómo es tu casa?.

    Divagaba en mi mente de niña de escasos 3 o 4 años (no recuerdo bien), que los rayos del sol, eran los caminos para llegar a Dios, que cuánto me hubiera montado en un rayo de sol para que me llevara a conocer al Señor. Y cuando el sol estaba ya alto, me iba a casa y preguntaba a mis padres: ¿Quién es Dios? ¿Dónde vive? ¿Cómo es para poder conocerlo?. Mis abuelos y mis padres me tomaban la manita y la colocaban en mi pecho y me decían: «Búscalo aquí…aquí vive en tu corazón».

    Por supuesto a mis escasos añitos, yo no podía asimilar cabalmente aquellas palabras ¿Cómo podía yo encontrar y visualizar al sol o a Dios en mi corazón?, si yo lo veía salir por la colina y me estremecía, ¿No era Dios quien salía todos los días por la colina entonces? ¿Qué acaso había otro Dios que yo aún no conocía?.

    Desde entonces amiga querida busqué a Dios, en el sol de la colina de mi pueblo, en el canto de los pájaros, en la exquisita textura y aroma de las flores del campo, en el murmullo de las hojas mecidas por el viento, en el arrullo del agua clara y cristalina que corría despacito por el río, en las huellas mías que dejaba por la arena, y hasta en la risa humilde de mis compañeritos de clases de primaria.

    ¡Qué hermosos recuerdos trajiste a mi mente al leerte amiga tiernocorazón!, muchas, muchísimas gracias desde mi alma, enviándote un enorme abrazo desde mi propio corazón al tuyo!

    Supongo que mi Dios es el mismo tuyo, y deseo que EL bendiga tus pasos hoy y siempre.

    Emocionada y feliz de leerte…¡Mil gracias!

    Vuestra amiga siempre.

    Doral.

    Responder
  18. :mrgreen: Buenos días mis queridas amigas… 😉

    Shoshan, doral, amigas y hermanas que Dios les llene por y para siempre de humildad, fe, esperanzas y amor sus corazones y sus vidas… :mrgreen:

    Ustedes Valeria y Dora son el ejemplo vivo de esto que promulgamos a diario acá en nuestra casita : darse al servicio del necesitado cuando este lo necesite,sin esperar nada a cambio… Bien por eso y para ustedes mil bendiciones mas de las que ya poseen y las que ya tienen que cada día se vean aumentadas en cantidad y calidad…

    Para todos dejo acá un escrito que encontré que es muy oportuno para el tema que tratamos hoy… léanlo, reflexionenlo y pónganlo en uso… Dios las bendiga a todas…

    Lo que todos deseamos:

    Todos deseamos una palabra de aliento cuando las cosas no han ido bien,
    y comprensión de los demás cuando, a pesar de la buena voluntad, nos hemos vuelto a equivocar;
    y que se fijen en lo positivo más que en los defectos;
    y que haya un tono de cordialidad en el lugar donde trabajamos o al llegan a casa;
    y que se nos exija en nuestro trabajo, pero de buenas maneras;
    y que nadie hable mal a nuestras espaldas;
    y que haya alguien que nos defienda cuando se nos critica y no estamos presentes;
    y que se preocupen de verdad por nosotros cuando estamos enfermos;
    y que se nos haga la corrección fraterna de las cosas que hacemos mal, en vez de comentarlas con otros;
    y que recen por nosotros
    y…
    Estas son las cosas que, con humildad y espíritu de servicio, hemos de hacer por los demás.Si nos comportamos así, entonces: Aunque vuestros pecados fueran como la grana, quedarán blancos como la nieve. Aunque fueren rojos como la púrpura quedarán como la blanca lana. Is 1,18.

    Lo que todos debemos cambiar: la soberbia

    Por el orgullo buscamos la superioridad ante los demás.
    La soberbia consiste en el desordenado amor de la propia excelencia. -Santo Tomás.

    La soberbia es la afirmación aberrante del propio yo.
    El hombre humilde, cuando localiza algo malo en su vida puede corregirlo, aunque le duela. El soberbio al no aceptar , o no ver, ese defecto no puede corregirlo, y se queda con él. El soberbio no se conoce o se conoce mal.

    La soberbia lo inficiona todo. Donde hay un soberbio, todo acaba maltratado: la familia, los amigos, el lugar donde trabaja… Exigirá un trato especial porque se cree distinto, habrá que evitar con cuidado herir su susceptibilidad… Su actitud dogmática en las conversaciones, sus intervenciones irónicas -no le importa dejar en mal lugar a los demás por quedar él bien-, la tendencia a poner punto final a las conversaciones que surgieron con naturalidad, etcétera, son manifestaciones de algo más profundo: un gran egoísmo que se apodera de la persona cuando ha puesto el horizonte de la vida en sí misma.

    «El primero entre vosotros sea vuestro servidor» -Mt 23, 11. Para eso hemos de dejar nuestro egoísmo a un lado y descubrir esas manifestaciones de la caridad que hacen felices a los demás. Si no lucháramos por olvidarnos cada vez más de nosotros mismos, pasaríamos una y otra vez al lado de quienes nos rodean y no nos daríamos cuenta de que necesitan una palabra de aliento, valorar lo que hacen, animarles a ser mejores y servirles.

    El egoísmo ciega y nos cierra el horizonte de los demás; la humildad abre constantemente camino a la caridad en detalles prácticos y concretos de servicio. Este espíritu alegre, de apertura a los demás, y de disponibilidad es capaz de transformar cualquier ambiente. La caridad cala, como el agua en la grieta de la piedra, y acaba por romper la resistencia más dura. “Amor saca amor” “Donde no hay amor, pon amor y sacarás amor” .

    Los grados de la humildad:
    1 conocerse, 2 aceptarse, 3 olvido de si, 4 darse.

    1 Conocerse. Primer paso: conocer la verdad de uno mismo.
    Ya los griegos antiguos ponían como una gran meta el aforismo: «Conócete a ti mismo». La Biblia dice a este respecto que es necesaria la humildad para ser sabios: Donde hay humildad hay sabiduría . Sin humildad no hay conocimiento de sí mismo y, por tanto, falta la sabiduría.

    Es difícil conocerse. La soberbia, que siempre está presente dentro del hombre, ensombrece la conciencia, embellece los defectos propios, busca justificaciones a los fallos y a los pecados. No es infrecuente que, ante un hecho, claramente malo, el orgullo se niegue a aceptar que aquella acción haya sido real, y se llega a pensar: «no puedo haberlo hecho», o bien «no es malo lo que hice», o incluso «la culpa es de los demás».

    Para superar: examen de conciencia honesto. Para ello: primero pedir luz al Espíritu Santo, y después mirar ordenadamente los hechos vividos, los hábitos o costumbres que se han enraizado más en la propia vida – pereza o laboriosidad, sensualidad o sobriedad, envidia…

    2 Aceptarse. Una vez se ha conseguido un conocimiento propio más o menos profundo viene el segundo escalón de la humildad: aceptar la propia realidad. Resulta difícil porque la soberbia se rebela cuando la realidad es fea o defectuosa.

    Aceptarse no es lo mismo que resignarse. Si se acepta con humildad un defecto, error, limitación, o pecado, se sabe contra qué luchar y se hace posible la victoria. Ya no se camina a ciegas sino que se conoce al enemigo. Pero si no se acepta la realidad, ocurre como en el caso del enfermo que no quiere reconocer su enfermedad: no podrá curarse. Pero si se sabe que hay cura, se puede cooperar con los médicos para mejorar. Hay defectos que podemos superar y hay límites naturales que debemos saber aceptar.

    Dentro de los hábitos o costumbres, a los buenos se les llama virtudes por la fuerza que dan a los buenos deseos; a los malos los llamamos vicios, e inclinan al mal con más o menos fuerza según la profundidad de sus raíces en el actuar humano. Es útil buscar el defecto dominante para poder evitar las peores inclinaciones con más eficacia. También conviene conocer las cualidades mejores que se poseen, no para envanecerse, sino para dar gracias a Dios, ser optimista y desarrollar las buenas tendencias y virtudes.

    Es distinto un pecado, de un error o una limitación, y conviene distinguirlos. Un pecado es un acto libre contra la ley de Dios. Si es habitual se convierte en vicio, requiriendo su desarraigo, un tratamiento fuerte y constante. Para borrar un pecado basta con el arrepiento y el propósito de enmienda unidos a la absolución sacramental si es un pecado mortal y con acto de contrición si es venial. El vicio en cambio necesita mucha constancia en aplicar el remedio pues tiende a reproducir nuevos pecados.

    Los errores son más fáciles de superar porque suelen ser involuntarios. Una vez descubiertos se pone el remedio y las cosas vuelven al cauce de la verdad. Si el defecto es una limitación, no es pecado, como no lo es ser poco inteligente o poco dotado para el arte. Pero sin humildad no se aceptan las propias limitaciones. El que no acepta las propias limitaciones se expone a hacer el ridículo, por ejemplo, hablando de lo que no sabe o alardeando de lo que no tiene.

    Vive según tu conciencia o acabarás pensando como vives. Es decir, si tu vida no es fiel a tu propia conciencia, acabarás cegando tu conciencia con teorías justificadoras.

    3 Olvido de sí. El orgullo y la soberbia llevan a que el pensamiento y la imaginación giren en torno al propio yo. Muy pocos llegan a este nivel. La mayoría de la gente vive pensando en si mismo, «dándole vuelta» a sus problemas. El pensar demasiado en uno mismo es compatible con saberse poca cosa, ya que el problema consiste en que se encuentra un cierto gusto incluso en la lamentación de los propios problemas. Parece imposible pero se puede dar un goce en estar tristes, pero no es por la tristeza misma sino por pensar en sí mismo, en llamar la atención.

    El olvido de sí no es lo mismo que indiferencia ante los problemas. Se trata más bien de superar el pensar demasiado en uno mismo. En la medida en que se consigue el olvido de sí, se consigue también la paz y alegría. Es lógico que sea así, pues la mayoría de las preocupaciones provienen de conceder demasiada importancia a los problemas, tanto cuando son reales como cuando son imaginarios. El que consigue el olvido de sí está en el polo opuesto del egoísta, que continuamente esta pendiente de lo que le gusta o le disgusta. Se puede decir que ha conseguido un grado aceptable de humildad. El olvido de sí conduce a un santo abandono que consiste en una despreocupación responsable. Las cosas que ocurren -tristes o alegres- ya no preocupan, solo ocupan.

    4 -Darse. Este es el grado más alto de la humildad, porque más que superar cosas malas se trata de vivir la caridad, es decir, vivir de amor. Si se han ido subiendo los escalones anteriores, ha mejorado el conocimiento propio, la aceptación de la realidad y la superación del yo como eje de todos los pensamientos e imaginaciones. Si se mata el egoísmo se puede vivir el amor, porque o el amor mata al egoísmo o el egoísmo mata al amor.

    En este nivel la humildad y la caridad llevan una a la otra. Una persona humilde al librarse de las alucinaciones de la soberbia ya es capaz de querer a los demás por sí mismos, y no sólo por el provecho que pueda extraer del trato con ellos.

    Cuando la humildad llega al nivel de darse se experimenta más alegría que cuando se busca el placer egoístamente. La única vez que se citan palabras de Nuestro Señor del Evangelio en los Hechos de los Apóstoles dice que se es mas feliz en dar que en recibir . La persona generosa experimenta una felicidad interior desconocida para el egoísta y el orgulloso.

    La caridad es amor que recibimos de Dios y damos a Dios. Dios se convierte en el interlocutor de un diálogo diáfano y limpio que sería imposible para el orgulloso ya que no sabe querer y además no sabe dejarse querer. Al crecer la humildad la mirada es más clara y se advierte más en toda su riqueza la Bondad y la Belleza divinas.

    Dios se deleita en los humildes y derrama en ellos sus gracias y dones con abundancia bien recibida. El humilde se convierte en la buena tierra que da fruto al recibir la semilla divina.

    La falta de humildad se muestra en la susceptibilidad, quiere ser el centro de la atención en las conversaciones, le molesta en extremo que a otra la aprecien más que a ella, se siente desplazada si no la atienden. La falta de humildad hace hablar mucho por el gusto de oírse y que los demás le oigan, siempre tiene algo que decir, que corregir, Todo esto es creerse el centro del universo. La imaginación anda a mil por hora, evitan que su alma crezca.

    -Que me conozca; que te conozca. Así jamás perderé de vista mi nada”. Solo así podré seguirte como Tú quieres y como yo quiero: con una fe grande, con un amor hondo, sin condición alguna.

    Se cuenta en la vida de San Antonio Abad que Dios le hizo ver el mundo sembrado de los lazos que el demonio tenía preparados para hacer caer a los hombres. El santo, después de esta visión, quedó lleno de espanto, y preguntó: “Señor, ¿Quién podrá escapar de tantos lazos?”. Y oyó una voz que le contestaba: “Antonio, el que sea humilde; pues Dios da a los humildes la gracia necesaria, mientras los soberbios van cayendo en todas las trampas que el demonio les tiende»

    Nos ayudará a desearla de verdad el tener siempre presente que el pecado capital opuesto, la soberbia, es lo más contrario a la vocación que hemos recibido del Señor, lo que más daño hace a la vida familiar, a la amistad, lo que más se opone a la verdadera felicidad… Es el principal apoyo con que cuenta el demonio en nuestra alma para intentar destruir la obra que el Espíritu Santo trata incesantemente de edificar.

    Con todo, la virtud de la humildad no consiste sólo en rechazar los movimientos de la soberbia, del egoísmo y del orgullo. De hecho, ni Jesús ni su Santísima Madre experimentaron movimiento alguno de soberbia y, sin embargo, tuvieron la virtud de la humildad en grado sumo. La palabra humildad tiene su origen en la latina humus, tierra; humilde, en su etimología, significa inclinado hacia la tierra; la virtud de la humildad consiste en inclinarse delante de Dios y de todo lo que hay de Dios en las criaturas. En la práctica, nos lleva a reconocer nuestra inferioridad, nuestra pequeñez e indigencia ante Dios. Los santos sienten una alegría muy grande en anonadarse delante de Dios y en reconocer que sólo Él es grande, y que en comparación con la suya, todas las grandezas humanas están vacías y no son sino mentira.

    ¿Cómo he de llegar a la humildad? Por la gracia de Dios. Solamente la gracia de Dios puede darnos la visión clara de nuestra propia condición y la conciencia de su grandeza que origina la humildad. Por eso hemos de desearla y pedirla incesantemente, convencidos de que con esta virtud amaremos a Dios y seremos capaces de grandes empresas a pesar de nuestras flaquezas…

    Quien lucha por ser humilde no busca ni elogios ni alabanzas porque su vida esta en Dios; y si llegan procura enderezarlos a la gloria de Dios, Autor de todo bien. La humildad se manifiesta en el desprecio sino en el olvido de sí mismo, reconociendo con alegría que no tenemos nada que no hayamos recibido, y nos lleva a sentirnos hijos pequeños de Dios que encuentran toda la firmeza en la mano fuerte de su Padre.

    Meditando la Vida de la Virgen María y uniéndonos a ella en oración. La mujer mas humilde y por eso también la escogida de Dios, la mas grande. La Esclava del Señor, la que no tuvo otro deseo que el de hacer la voluntad de Dios.
    También acudimos a San José, que empleó su vida en servir a Jesús y a María, llevando a cabo la tarea que Dios le había encomendado.

    Espero no cansarlas con este comentario, leanlo y analicenlo ya verán cuanta sabiduría y paz nos dejare en el alma y en el corazón…

    FELIZ DÍA PARA TOD@S, CUÍDENSE…

    ÉXITOS Y DIOS LOS BENDIGA SIEMPRE…

    SU AMIGA Y HERMANA POR Y PARA SIEMPRE…

    :mrgreen: MAITE :mrgreen:

    P.D.: Todo lo que queráis que hagan los hombres con vosotros, hacedlo también vosotros con ellos -Cf Mt 7, 12.

    Responder
  19. Mayte..
    Me quedo con esta parte de tu respuesta
    !»»a soberbia lo inficiona todo. Donde hay un soberbio, todo acaba maltratado: la familia, los amigos, el lugar donde trabaja… Exigirá un trato especial porque se cree distinto, habrá que evitar con cuidado herir su susceptibilidad… Su actitud dogmática en las conversaciones, sus intervenciones irónicas -no le importa dejar en mal lugar a los demás por quedar él bien-, la tendencia a poner punto final a las conversaciones que surgieron con naturalidad, etcétera, son manifestaciones de algo más profundo: un gran egoísmo que se apodera de la persona cuando ha puesto el horizonte de la vida en sí misma.»»

    Las personas que que les falta humildad y son soberbios porque creen que la vida todos le deben algo..
    No podías describirlo mejor

    Gracias mi amiguita ..
    Te quiero
    Gracias
    Shos

    Responder
  20. QUERIDA AMIGA OLGA:

    Retomando tu propio comentario amiga querida:

    «Una persona que actué así, definitivamente no conoce la naturaleza humana. Todos tenemos el deseo de ser importantes. Sabiendo esto, cualquier persona con que conversemos deseará hablar de ella misma. Por que la naturaleza humana es egoísta. Si nosotros queremos triunfar en las relaciones humanas, no lo debemos perder de vista.

    Debemos recordar, que no lograremos cambiar a las personas, lo que si podemos cambiar somos nosotras. Ver las cosas desde otro punto de vista»

    Quiero complementarlo con otro en la misma sintonía que como nota musical del amar a un ser humano, resulta una melodía maravillosa en el arte de ser humildes:

    Amar a un ser humano es ser suficientemente humilde como para recibir su ternura y su cariño sin representar el papel del que nada necesita; es aceptar con gusto lo que te brinda sin exigir que te dé lo que no puede o no desea; es agradecerle a la vida el prodigio de su existencia y sentir su presencia una auténtica bendición en tu
    sendero; es disfrutar de la experiencia sabiendo que cada día es una aventura incierta y el mañana, una incógnita perenne; es vivir cada instante como si fuese la primera vez que lo tomas de la mano, haciendo que lo cotidiano sea siempre una creación distinta y milagrosa.

    Amar a un ser humano es atreverte a expresar el cariño espontáneamente a través de tu mirada, de tus gestos y sonrisas; de la caricia firme y delicada, de su abrazo vigoroso, de tus besos, con palabras francas y sencillas; es hacerle saber y sentir cuánto lo valoras por ser quien es, cuánto aprecias sus riquezas interiores, aún aquellas que él mismo desconoce; es ver su potencial latente y colaborar para que florezca la semilla que se encuentra dormida en su interior; es hacerlo sentir que su desarrollo personal te importa honestamente, que cuenta contigo; es permitirle descubrir sus capacidades creativas y alentar su posibilidad de dar todo el fruto que podría; es develar ante sus ojos el tesoro que lleva dentro y cooperar de mutuo acuerdo para hacer de esta vida una experiencia más rica y más llena de sentido.

    Amar a un ser humano es también atreverte a establecer tus propios límites y mantenerlos firmemente; es respetarte a ti mismo y no permitir que el otro transgreda aquello que consideras tus derechos personales; es tener tanta confianza en ti mismo y en el otro, que sin temor a que la relación se perjudique, te sientas en libertad de expresar tu enojo sin ofender al ser querido, y puedas manifestar lo que te molesta e incomoda sin intentar herirlo o lastimarlo. Es reconocer y respetar sus limitaciones y verlo con aprecio sin idealizarlo; es compartir y disfrutar de los acuerdos y aceptar los desacuerdos, y si llegase un día en el que evidentemente los caminos divergieran sin remedio, amar es ser capaz de despedirte en paz y en armonía, de tal manera que ambos se recuerden con gratitud por los tesoros compartidos.

    Amar a un ser humano es ir más allá de su individualidad como persona; es percibirlo y valorarlo como una muestra de la humanidad entera, como una expresión humilde del Hombre, como una manifestación humilde y palpable de esa esencia trascendente e intangible llamada «ser humano», de la cuál tú formas parte; es reconocer, a través de él, el milagro indescriptible de la naturaleza humana, que es tu propia naturaleza, con toda su grandeza y sus limitaciones; apreciar tanto sus facetas luminosas y radiantes de la humanidad, como sus lados oscuros y sombríos; amar a un ser humano, en realidad, es amar al ser humano en su totalidad; es amar la auténtica naturaleza humana, tal como es, y por tanto, amar a un ser humano es amarte a ti mismo y sentirte orgulloso de ser una nota en la sinfonía de este mundo, aunque sea la más humilde de todas las notas musicales.

    Desconozco el autor de este bellisimo escrito que alguna vez llegó a mi correo personal, pero lo consigno aquí y ahora Olga amiga en tu espacio con mucho cariño y agradecimientos por tus hermosas palabras respecto de este tema.

    Vuestra amiga siempre.

    Doral.

    Responder
  21. 😀 Buenas tardes, saludos a todas, interesante el tema de hoy, la humildad es lo mas hermoso que dios nos ha dado lastima que muchas personas no lo crean. En mi caso mi esposo tiene un alto cargo en el gobierno pero nuestras vidas siguen igual que antes mas bien esto nos ha alejado de aquellas amistades que creen que porque lo tienes todo debes dartela de gran cosa y ese no ha sido ni sera nuestro lema. En la vida hay que luchar mucho para lograr lo que uno quiere no por ello debemos restregarle en la cara a los demas lo que tenemos. Debemos aprender a ser humilde ya que el dinero se acaba pero te queda lo que has cosechado la amistad sincera y verdadera que no se compra con todo el dinero del mundo. Saludos y que la sigan pasando bien 😉

    Responder
  22. Desafortunadamente no hay mucha humildad en estos dias, yo tambien tengo familiares que tienen problemitas de soberbia. Esperemos que tu mensaje les toque el corazon a mucha gente.

    Responder
  23. Bueno hace rato no participo en los temas, pero si los leo y la verdad estan muy interesantes, el tema me llamo mucho la atención, porque conosco personas asi.
    Yo creci en un hogar donde el unico que llevaba el sustento era mi padre, y en ese lapso de tiempo nos enseño algo muy importante a ser humuldes y no envidiar los bienes ajenos y se lo agradesco mucho, hoy gracias a Dios mis hermanos y yo nos llevamos muy bien y a pesar de que mi estatus economico ya no es el mismo no me da el derecho de alardear de lo que tengo menos con mi familia ni amistades que quizas por destino de la vida no les ha hido bien pero si bien es cierto la vida tiene sus altas y bajas y hoy podemos estar bien y tener de todo y mañana no.
    Asi que pienso que las personas que alardean de lo bien que les ha hido no han pasado situaciones dificiles en su vida, y piensan que los demas no tienen ciertas cosas porque no se esfuerzan.

    Responder
  24. Holis mis amig@s
    Aveces creemos q lo material es importante es nuestra vida ,aveces pensamos q xq tenemos mucho dinero tenemos comprado el mundo y no es asi ,sinceramente lo mas ricos son muy tacaños y los pobres son los q mas prestan su ayuda a los demas ,hay gente q tiene hasta de sobra y no le gusta compartir ,yo aprendi ser humilde desde muy niñña nunca me eh creido en nada a pesar q en un tiempo tuve una buena estabilidad economica muy buena claro con mi esfuerzo en mi trabajo ,siempre eh ayudado a mi familia vivo apegada a mi familia y siempre me a gustado ayudar a mi familia y no solo a mi familia sino a extraños lo poco q siempre eh tenido lo eh compartido con mi gente ,a pesar q cai en la banca rota despues nunca deje de ser humilde hasta ahora y no creo q deje de serlo, eh visto mucha gente a mi entorno q ah crecido con su negocios pero cambian ,nose hasta cuanto el dinero cambia a la gente xq mas dinero tienen mas tacaño se vuelven o en algunas personas no lo cambian el dinero, ay q saber valorar lo q tenemos si tenemos dinero agradecerle a Dios ya q el nos da fuerza en todo momento para salir adelante ,Gracias a Dios q tengo amigos adinerados pero ellos no son soberbios ,ni egoistas a lo contrario si x ellos fueran ayudarian a todo el mundo sin importarles qdarse sin dinero ,pero no solo la humildad se trata de dinero sino tambein aprender a valorar a las personas q tienes cerca ,tratarlos con mucho respeto ,no ser indiferentes con los pobres,negritos ,mestizos ect ect. ,hay q tratar a la humanidad con igualdad 😉
    Lo mas hermosos q nos a dado nuestro Dios es la humildad 😮 :mrgreen:
    Besotes

    Responder
  25. Buenas tardes a todas 😎 y todos los que nos leen.

    Gracias nuevamente por este tema, a veces estoy un poco atareada y no tengo tiempo de entrar en esta casa, pero aqui estoy enterandome de cosas muy buenas e interesantes, ya que como comentan la Humildad a veces nos hace falta o simplemente «se nos olvida». En mi caso si hubo y nos inculcaron tenerlo, mas bien ser humildes con las personas que realmente se debe de ser humilde. Por ejemplo el decir «No Lo Se, Me puedes Enseñar por favor», creo eso es ser humilde. El reconocer que no sabemos de algo o aquello y no alardear de lo que no conocemos o sabemos porque caemos en la mentira. Tambien el rebajar a la gente, verla desde arriba como si fueran los sabiondos y ellos los de abajo no, creo eso tambien es humildad, estar enfrente de la gente ya sea pobre o rica o igual que nosotros y tratarla como es «SOMOS SERES HUMANOS» creo solo Dios es el unico que nos puede ver así, pero ni él es así el nos quiere como somos, pobres, ricos, gorditos, flaquitos, etc. Asi que la proxima ves que tengamos a la gente a nuestro alrrededor siempre debemos verla como seres humanos.

    Yo tengo un pequeño ejemplo de ahora: El dueño de la empresa donde trabajo empezó conmigo en su negocio ahora el tiene su Casota, su carro mercedes y su bmw, ayudó a sus hermanos, viaja por varios paises, pero su amistad hacia mi y como su empleada porque no tuve para ser socia de esta empresa, él aun me hace invitaciones para estar junto a su familia, en los cumpleaños de sus hijos ahi estoy, cuando tiene que regañar me regaña, tengo uno que otro privilegio, y eso para mi es indiscutible qu él SI TIENE HUMILDAD siento yo hacia mi persona. Ustedes que opinan.

    Como siempre mis bellas mujeres agradezco y espero sus humildes comentarios.

    Responder
  26. hola
    en lo personalñ la humildad es una de las mas grandes virtudes que puede poseer una pesona ya que son pocas llas personas que la tienen cual dificil es callar lo que hemos hecho o lo que somos o guardar silencio en algunas ocasiones
    sinembargo una persona humilde vale mas de lo que se imaginan. como dicen el hombre que mas vale da un trato sencillo y noble. considero que cuando uno en realidad hace las cosas no hay motivo para llenarse de vana gloria
    puesto que lo que logramos noes por nosotros sino por dios mismo entonces porque gloriarnos de algo que no hemos hecho. las cosas cuando se hacen bien solas salen a la vista no hay nada que demostrar mucho menos que cantar.

    Responder
  27. LA HUMILDAD TE HACE GRANDE…. MUESTRA TUS RAICES SI DEJAS DE SERLO ESTARAS OLVIDADNDO DE DONDE VIENES Y LA ENSEÑANZA DE TUS PADRES… NO LO OLVIDES….

    LA CALIDAD HUMANA QUE DEMUESTRES A LOS DEMAS SERES HUMANOS HARAN QUE SEAS UN EXCELENTE SER HUMANO CAPAZ DE ENTENDER LOS PROBLEMAS DE LOS DEMAS…..

    Responder
  28. HOLA AMIGAS;PERDONA QUE NO OPINO SOBRE EL TEMA PERO SI ESTOY DE ACUERDO QUE UNO TIENE QUE SER HUMILDE TANTO DE CORAZON COMO DE ESPIRITU.

    ME ESTOY COMUNICANDO PORQUE QUIERO COMENTAR MIS TRISTEZAS COMO ALQUIEN COMO USTEDES

    GRACIAS POR EXISTIR ESTA PAGINA

    Responder

Comenta, tu opinión también es valiosa: